¿Cuándo podría utilizarse la radioterapia para tratar el cáncer de origen primario desconocido?
La radioterapia se puede utilizar para tratar los síntomas del cáncer de origen primario desconocido (CUP, por su sigla en inglés), como el dolor o las fracturas óseas causadas por tumores. A veces, la radioterapia se utiliza después de una cirugía de ganglios linfáticos o para tratar pequeños tumores en los pulmones o el cerebro.
Se reunirá con un equipo de especialistas en cáncer para planificar su tratamiento. Este equipo podría incluir un cirujano, un oncólogo médico y un oncólogo radioterapeuta. El proveedor de atención médica que se especializa en el tratamiento del cáncer con radiación se llama oncólogo radioterapeuta. Este proveedor de atención médica trabaja con usted para decidir el tipo de radioterapia que necesita. También determina la dosis y cuánto tiempo necesita recibir tratamiento.
¿Cómo se administra la radioterapia para el cáncer de origen primario desconocido?
Hay dos formas de administrar radioterapia para el CUP: radioterapia de haz externo o radioterapia interna. El tipo de radioterapia utilizada depende de dónde está el tumor, de su tamaño y de si el cáncer se ha propagado. La radioterapia de haz externo se utiliza con mayor frecuencia.
Radioterapia externa
La manera más frecuente de recibir radioterapia para un CUP es mediante una máquina grande que dirige los rayos de radiación hacia el cáncer. A este tratamiento se lo conoce como radioterapia de haz externo. A veces, se utilizan tipos especiales de radioterapia de haz externo, como la radioterapia de intensidad modulada. Esto se hace para intentar limitar la cantidad de radiación que alcanza y daña las células normales cercanas.
Los tratamientos son muy parecidos a hacerse una radiografía. Esto significa que no se ve la radiación ni se siente el haz, pero lleva más tiempo, de 15 a 30 minutos. Debería planificar estar allí alrededor de una hora en total. Es probable que reciba tratamientos una vez al día, 5 días a la semana, de lunes a viernes, durante varias semanas.
Preparativos para la radioterapia
Antes del primer tratamiento con radiación, tendrá una cita llamada simulación. Esta es necesaria para determinar el lugar exacto del cuerpo en donde se dirigirá el haz de radiación. Esto puede tardar hasta 2 horas. Durante esta sesión, se pueden hacer exploraciones de diagnóstico por imágenes, como tomografías computarizadas, resonancias magnéticas o tomografías por emisión de positrones. Estas exploraciones le permiten al equipo de tratamiento conocer la ubicación exacta del tumor para poder dirigir la radiación directamente hacia él. Además, en esta sesión, es posible que le hagan moldes del cuerpo para colocarlo exactamente en la misma posición y evitar que se mueva durante los tratamientos.
Luego, deberá quedarse quieto sobre una camilla mientras un radioterapeuta utiliza una máquina para hacer la exploración y definir su campo de tratamiento. El campo es el área exacta del cuerpo a donde se dirigirá la radiación. A veces, se denomina puerto. El terapeuta puede marcarle la piel con pequeños puntos de tinta o tatuajes semipermanentes. Esto se hace para que la radiación se dirija exactamente al mismo lugar en cada sesión.
Los días que recibe radiación
Los días que reciba tratamiento, deberá recostarse sobre una camilla mientras la máquina gira a su alrededor. Es posible que deba usar una bata de hospital. Un radioterapeuta lo ayudará a ponerse en posición y puede usar bloques o escudos especiales para proteger partes del cuerpo de la exposición a la radiación. Luego, el terapeuta coloca las luces de la máquina sobre las marcas en la piel para que la radiación se dirija al lugar correcto.
Cuando esté listo, el radioterapeuta saldrá de la sala y encenderá la máquina. Es posible que oiga chirridos o chasquidos cada vez que la máquina se mueva durante la radiación. Puede sonar parecido a una aspiradora. La máquina no lo tocará. Durante la sesión, podrá hablar con el radioterapeuta y escucharlo mediante un intercomunicador. No puede sentir la radiación, por lo que no sentirá dolor durante el proceso. No será radiactivo después de recibir el tratamiento.
Radioterapia interna
La radioterapia interna no se utiliza con frecuencia para tratar el CUP. Para este tipo de radioterapia, se coloca una aguja o un catéter de plástico cerca o dentro del tumor para administrar una dosis de radiación dirigida directamente a las células cancerosas. La radiación viaja solo una distancia corta. Por lo que solo afecta las células cercanas. A veces, se necesita cirugía para dirigir la radiación al lugar correcto. La radioterapia interna se puede hacer junto con la radioterapia externa.
¿Cuáles son los efectos secundarios comunes de la radioterapia?
La radiación afecta tanto las células sanas como las cancerosas. Esto significa que puede causar efectos secundarios. Los efectos secundarios dependerán de la parte del cuerpo que se trate. Si tiene efectos secundarios, el proveedor de atención médica puede cambiar la dosis de radiación o la frecuencia con la que recibe tratamiento. También puede suspender el tratamiento hasta que los efectos secundarios mejoren. Pregúntele al proveedor de atención médica a qué efectos secundarios debe estar atento. Los siguientes son algunos de los efectos secundarios más frecuentes:
-
Llagas en la boca, irritación y sequedad en la boca
-
Diarrea
-
Cansancio intenso (fatiga)
-
Náuseas
-
Irritación de la piel en el área de tratamiento. La piel puede secarse, enrojecerse y tener ampollas, como una quemadura solar.
En la mayoría de los casos, los efectos secundarios a corto plazo desaparecen con el tiempo una vez finalizado el tratamiento. Infórmele al proveedor de atención médica de inmediato los efectos secundarios que tenga. Es importante tratarlos antes de que empeoren.
Es posible que los efectos secundarios a largo plazo de la radiación no aparezcan hasta años después de finalizar el tratamiento. Estos efectos dependen de la dosis y la ubicación de la radiación. También dependen de cuántas veces recibió tratamiento. Pregunte al proveedor de atención médica lo que debe esperar.
Colabore con el proveedor de atención médica
Hable con el equipo de atención médica sobre los signos que debe observar y cuándo debe llamarlos. Por ejemplo, la radiación puede dañar la piel y aumentar la probabilidad de contraer una infección. Sepa cómo obtener ayuda fuera del horario de atención del consultorio y durante los fines de semana o los feriados.
Puede ser útil llevar un registro de sus efectos secundarios. Anote los cambios físicos, mentales y emocionales. Tener una lista por escrito hará que le resulte más fácil recordar las preguntas cuando concurra a los controles. También les facilitará a usted y al equipo de atención médica el control de los efectos secundarios.